La red de Cámaras se pone a disposición de la Delegación del Gobierno para ejercer de ventanilla empresarial en los ámbitos de mediación y arbitraje, consultoría técnica y digitalización
El Consejo de Cámaras urge medidas financieras, fiscales y laborales que permitan la reactivación económica inmediata
Valladolid.
8/4/2020. Los presidentes de las Cámaras de Comercio de Castilla y León han
mantenido esta mañana una reunión telemática con el delegado del Gobierno en
Castilla y León, Javier Izquierdo, durante la cual han compartido la preocupación
por el actual contexto provocado por el COVID-19 tanto en lo que respecta a la
emergencia sanitaria como a la difícil situación que atraviesa el conjunto del
tejido empresarial.
Antonio Miguel Méndez Pozo, presidente del Consejo de
Cámaras de Castilla y León, ha puesto a disposición de Javier Izquierdo la red de
Cámaras para, aprovechando las funciones asignadas por la Ley 8/2018 como
Corporaciones de Derecho Público, poner en marcha un programa específico que
evite el cierre de las empresas a causa del coronavirus y el asesoramiento
técnico en cada punto para la ayuda a diferentes tramitaciones empresariales.
Igualmente, ha destacado el papel de las instituciones para actuar como agentes
activos en las labores de mediación y arbitraje laboral como método ágil y rápido
para la resolución de conflictos y la posibilidad de ejercer de ventanillas
para el impulso a la digitalización en el territorio en el marco del Plan
Acelera Pyme.
Méndez Pozo expuso la total colaboración y lealtad para
tomar medidas contundentes encaminadas a permitir la continuidad de la
actividad empresarial sin que el empleo se vea afectado, dado que nos
encontramos en un momento de transición donde hay que actuar con total responsabilidad
hacia empresas, autónomos y, en definitiva, hacia el conjunto de la sociedad
para paliar la recesión económica.
Además, los representantes de las entidades camerales
han trasladado las medidas y acciones que el consideran esenciales en materias financiera,
fiscal y laboral, tanto para la vuelta al inicio de la actividad como para su posterior
mantenimiento en el tiempo.
En este
sentido, el Consejo de Cámaras ha urgido a que traslade de forma urgente al
gobierno nacional en el ámbito financiero la gestión de ayudas directas
europeas a empresas por la caída de la producción o bien, en otros casos, por
seguros a la exportación; la inyección de liquidez a tipo cero y un año de
carencia a autónomos y empresas ampliando los avales del Estado y posibilitando
que las entidades financieras agilicen y faciliten su acceso y también implementar
estímulos a la demanda para empresas auxiliares, analizando las necesidades de
cada sector.
También, se
expuso la necesidad de conceder ayudas específicas destinadas al medio rural
para las microempresas implantadas en los pequeños municipios que, en muchos
casos, se están viendo abocadas al cierre y que necesitan una segunda oportunidad.
En relación
a las exportaciones, donde se continúan realizando operaciones, es crucial lanzar
un paquete de ayudas a empresas mediante desembolsos para amortizar las
pérdidas ocasionadas al dejar de acudir a ferias internacionales programadas
con antelación.
En lo que al ámbito fiscal se refiere, los representantes
de las Cámaras instaron a tramitar de forma urgente la eliminación, aplazamiento
o exención temporal, dependiendo de los casos, del pago de los impuestos como
el IRPF, el IVA y las cuotas a la Seguridad Social.
En
el ámbito laboral se expuso, mayor flexibilidad y homogeneización en los criterios
de los ERTES y, de cara al inicio de una actividad productiva, dotar establecer
una hoja de ruta clara para su urgente planificación, organización y
coordinación, en lo que a normas y protocolos de apertura se refiere, poniendo de
manifiesto la necesidad de abastecimiento de EPIs para la protección de los
trabajadores.
Debido
a ciertas interpretaciones de normativas, las Cámaras solicitaron un documento
específico por sectores que, con claridad y agilidad, sirva para establecer un
criterio objetivo en el conjunto del país para que cada empresa pueda cumplir
con las normas y conozca en qué marco productivo se encuentra, tanto si pertenecen
al sector de la automoción, construcción, comercio, industria, transporte,
turismo u otros servicios, ya que las necesidades de cada uno son específicas.